Las elecciones parciales para elegir un diputado en el departamento de Aube, al sureste de París, han puesto a los franceses frente al espejo de su delicada situación política. Los resultados de la primera vuelta han demostrado el desapego de los ciudadanos por sus dirigentes (una abstención del 75%) y que los conservadores de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) han comenzado el camino hacia el regreso al poder. Pero sobre todo han remachado el inquietante ascenso del ultraderechista Frente Nacional (FN) y el hundimiento del gobernante Partido Socialista, cuyo candidato fue eliminado para la segunda vuelta. Es el panorama general que los sondeos dibujan para los próximos años.
"El sistema político está muerto... Desde hace mucho tiempo", ha escrito en su cuenta de Twitter el derrotado candidato socialista, Olivier Girardin. Dirigentes de su partido, y especialmente los del ala izquierdista, llevan meses alertando de la "catástrofe electoral" que los acecha.
En Aube se disputa esta semana el escaño dejado vacante por el diputado de la UMP François Baroin, elegido senador en septiembre. Gérard Menuel, candidato por el partido de Nicolas Sarkozy, logró sin sorpresa la primera posición en la primera vuelta del domingo con el 40,76% de los votos. Un triunfo de la UMP similar al de 2012.
La noticia estaba en los resultados de sus competidores: Bruno Subtil, del FN y el socialista Girardin. Subtil, jefe en esa región del partido de Marine Le Pen, logró la segunda posición con el 27,64% de los votos, 10 puntos por encima de lo que los ultraderechistas consiguieron en esa circunscripción en las legislativas de hace dos años.
El socialista Girardin, por el contrario, se quedó con un decepcionante 14,69%, la mitad de lo que había logrado el partido deFrançois Hollande en ese distrito en 2012. Salvo en Chapelle-Saint-Luc, el pueblo del que es alcalde, Girardin fue superado por Subtil en las 70 comunas o municipios de la circunscripción.
Por tanto, la segunda vuelta del próximo domingo enfrentará al derechista Menuel y al ultra Subtil. Es el escenario generalizado que plantean las encuestas para las próximas legislativas o incluso las presidenciales de 2017. La última, elaborada por el Instituto CSA y difundida la semana pasada por Le Figaro, señala que la ultraderecha y la derecha se disputarían los escaños en la segunda vuelta en 359 de las 577 circunscripciones existentes. El FN estaría presente en la segunda vuelta en un total de 423 distritos. El sondeo concluye que los socialistas serían laminados y obtendrían solo el 18% de los votos frente al 34% que lograron hace dos años.
Lo que ocurriría en esa segunda vuelta es también un reflejo de lo que pasa ahora en Aube: la llamada a un "frente republicano" para frenar al Frente Nacional.
Los socialistas han pedido ya a sus militantes y simpatizantes que el próximo domingo voten al candidato de la UMP para cortar el paso a la ultraderecha. Es lo que se prevé que ocurrirá en 2017 en la batalla final por El Elíseo y en muchas circunscripciones en las legislativas.
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